El incremento del consumo de fuentes de energía aumentó un 17% desde el período 1997 al 2000, y la falta de datos actualizados, podemos prever que el consumo sigue el alza. Este aumento de consumo lleva consigo una fuerte dependencia de los combustibles fósiles y del exterior, ya que la mayoría de los combustibles fósiles son importados, hasta el punto de que en España importara hasta un 75% de la energía que se consume. A la vista de este escenario, se hace imprescindible una concienciación general sobre el ahorro de la energía, y su consumo responsable. Para concienciarnos a todos, y darnos las pautas de conducta idóneas para llevar a cabo este ahorro, tanto el IDAE (Instituto para lana Diversificación y él Ahorro Energético), como el INEGA (Instituto Energético de Galicia), desarrollan campañas en estos aspectos. Recomendamos visitar la guía del ahorro energético del Inega donde encontraremos cumplida información sobre el ahorro energético. FAEPAC, en su contribución al fomento del ahorro, elaborará unas guías orientadas tanto al sector doméstico como a las instituciones públicas. Mientras no llega su publicación ofrecemos unos consejos sencillos para poner en práctica.
Consejos sencillos fáciles de poner en práctica para ahorrar en la casa.
El uso de la iluminación es uno de los puntos que más influye en la factura de la electricidad, apague las luces cuando no las precise, cambie sus bombillas tradicionales por bombillas de bajo consumo, aunque son más caras, duran mucho más, lo que hace rentable su compra.
Es uno de los elementos que más energía consume en el hogar. Debemos de mantener una temperatura de confort idónea, la temperatura de referencia anda por los 20º. Temperaturas más altas hacen que el consumo aumente considerablemente.
El vídeo, DVD o el sintonizador de televisión digital, cuando los apagamos con el mando a distancia, en realidad no se apagan, si no que pasan a un modo de espera, por lo que siguen consumiendo energía, esta y la denominada "energía fantasma". Los apaguemos en el interruptor, y así evitaremos un gasto de alrededor de un 3% de energía.
Si usamos vitrocerámica, es muy importante aprovechar el calor residual. En la cocina debemos de usar ollas algo más grandes con el fogón en el que las ponemos, el fin de aprovechar bien todo el calor disponible.
Los hornos microondas son muy efectivos para calentar pequeñas porciones de alimentos, ya que consumen entre un 30% y un 70% menos que los hornos convencionales.
La aspiradora consume mucha más energía, se trabaja con la bolsa de la basura atascada, o muy llena, y con los filtros en mal estado. Un mantenimiento acomodado de estos puntos hará que nuestra aspiradora funcione y consuma como el primer día.
Los frigoríficos y congeladores deben estar instalados en sitios ventilados, lejos de fuentes de calor. Tenemos que cuidar el estado de las gomas de las puertas, ya que son las que garantizan que el frío del interior se mantenga.
es un sistema que establece la relación de la energía que consume el electrodoméstico con la cantidad de trabajo que desarrolla. El etiquetado pretende ser una vía de información que le facilite al usuario datos sobre el consumo, ruido, vida media, eficiencia en lavado o secado. Los etiquetados, según el electrodoméstico en cuestión, van desde la letra A (la más eficiente) hasta la F.
ES muy importante sustituir los temporizadores, que regulan el alumbrado de las escaleras, por detectores de presencia, o instalar temporizadores por plantas, para que no se tengan que encender todas las luces de la escalera, cuando salimos del ascensor, en cualquier planta. También es muy eficiente colocar balastros electrónicos en las luces que tienen que echar encendidas muchas horas, como las de los garajes.
La manera más eficiente de ahorrar es utilizando el transporte público y colectivo. Si tenemos que viajar en nuestro automóvil, debemos de saber cómo es la ruta que vamos a hacer, para evitar atascos. En FAEPAC estamos impartiendo cursos para que la conducción que hacemos todos los días sea más eficiente. En general los consejos que podemos dar son:
-Arranque del motor sin acelerar.
-Empiece la conducción de corrido, sin esperar a que el motor se caliente.
-Use marchas largas.
-Aumente la distancia de seguridad.
-A poder ser, use biocombustibles.